Compartir nudes en internet (imágenes y videos propios de contenido erótico), o también llamado sexting, es una práctica que se ha extendido gracias a la masificación de dispositivos móviles, los cuales cuentan con cámaras que toman foto y video de alta calidad.
Esa masificación ha hecho que la mayor parte de la población económicamente activa tenga la posibilidad de generar contenido privado y enviarlo a sus contactos, a sabiendas de las consecuencias que se siguen de eso, sólo que esa misma tecnología también la tienen los menores de edad.
¿Qué es sexting?
El significado de Sexting se refiere a compartir imágenes o videos íntimos de carácter sexual a otra persona, por medio de los teléfonos celulares u otro dispositivo digital. El individuo que recibió el material sexual, en la mayoría de los casos, es alguien con el que se tiene una relación, sea noviazgo, encuentros íntimos o “Amistades por internet”.
Este término se creó a partir de la conjunción de las palabras en inglés sex (sexo) y texting (envío de mensajes de texto).
El enviar fotos es cotidiano y siempre surge la posibilidad de tratar de realizar algún juego de seducción con el otro en el que se dé el envío de imágenes sugerentes o abiertamente sexuales.
Generalmente, se dice que alguien envía su pack cuando envía mediante mensajes privados imágenes de contenido sexual en las que se ve involucrada la imagen de quien las manda.
Éste acto supone mucha confianza en el receptor y en el carácter privado de la red de comunicación que se usa, se supone que son datos privados y que competen sólo a los individuos que juegan como emisor o receptor de ellas.
Consecuencias y riesgos del Sexting
El practicar el sexting puede tener consecuencias negativas, ya que la persona que le compartiste tus fotografías íntimas, puede quebrantar la privacidad al difundir las imágenes y viralizarlas en la red, en ese caso, muchos usuarios (incluyendo amigos, personas del trabajo, la escuela y familiares) pueden tener acceso a dicho contenido explícito.
Quien es la autora o autor de dicho contenido sexual, puede sufrir de:
- Ciberbullying.
- Ciberacoso.
- Acoso sexual.
- Intimidación.
- Rechazo social.
- Humillación pública.
- Ser juzgado sin conocer el caso.
- Depresión.
- Ansiedad.
- Estrés.
- Encontrar el contenido en sitios no aptos para menores.
La persona que tiene en su poder el contenido de índole sexual, puede extorsionar a quien se tomó las fotos o videos, para que no las suba a la red. Este tipo de extorsión suele ser monetario o sexual.
Los efectos de la vida digital se hacen presentes en la vida real, especialmente si pensamos que atrás de cada perfil de una red social hay personas.
Sexting en la pubertad
El desarrollo sexual inicia con la pubertad, y en muchas ocasiones la posesión de un smartphone también llega en esta etapa de la vida, por lo que ciertas prácticas digitales pueden llevarse a cabo con la finalidad de pertenecer a determinados grupos de amigos.
Hay que considerar que entre esas prácticas estarán algunas que se asocian con el desarrollo de los carácteres sexuales secundarios, por lo que se puede presentar el sexting entre los menores de edad, sin que ellos mismos tengan pleno conocimiento de lo que hacer esto ocasiona, ni los riesgos que conlleva pasarle sus «Nudes» a un amigo o pareja.
Al practicar el sexitng, los menores de edad pueden sufrir de grooming, o sea de ser acosada o acosado en internet por una persona mayor. Este acto puede ser considerado pornografía infantil.
Cuidado con los Nudes: Lo que se comparte en internet, se queda en internet
Tanto adultos como menores de edad deben saber que lo que se sube o comparte por internet se queda para siempre en internet, no importa si se elimina una publicación o se borra una imagen, siempre es posible volver a encontrarla gracias a que las cosas en la red se viralizan muy rápido y siempre es posible que queden copias.
De acuerdo con la policía cibernética de la ciudad de México, para evitar que las imágenes de índole sexual de los adolescentes se produzcan siquiera, primero los padres deben hablar con sus hijos acerca de los riesgos de compartir información o imágenes en la red.
“El desconocimiento te hace más vulnerable, comparte sobre todo con los niños, la información sobre los riesgos que hay en internet al publicar datos personales”, señala la organización en su portal.
La práctica de sexting en adolescentes, a veces se convierte en factor inicial para otro tipo de problemáticas, que van desde problemas como embarazos hasta algo más fuerte como la muerte, si es que las fotografías inundan el internet y los afectados toman decisiones drásticas y lamentables.
Sexting fuera de control: ¿Qué hacer cuándo ya se han viralizado las imágenes eróticas?
En primer lugar, debes solicitar a la red social en la que están esas imágenes, sean eliminadas.
Aunque lo que se sube a Internet se queda en Internet, la eliminación de cuentas falsas o de ciertas imágenes puede minimizar los daños.
Además de acudir con los administradores de las redes sociales, es posible recibir asesoría por parte de la Policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
La mejor práctica para evitar el sexting sin tu permiso es no producir imágenes eróticas y compartirlas, ya que aunque se cree en una persona es confiable, si en un futuro existe una riña, una ruptura, o por simple diversión, es probable que este individuo «confiable» compartirá las imágenes.
En otro caso, se podría sufrir de robo de dispositivos o ataques de ransomware que los criminales podrían viralizar las fotografías íntimas.
Pero si es el caso que se decida realizar el sexting, hay que tener en cuenta este tipo de riesgos; en el caso de que se hayan propagado por internet las imágenes eróticas, lo mejor es entender que todavía es posible recuperar la dignidad de la persona afectada y evitar con ello más daño.
En el caso de que las fotografías de un menor se viralizan, lo más importante es que gente cercana y de gran confianza, como padres, familiares, amigos, incluso profesores, sean fuentes de apoyo para él, además conviene llevarlo con especialistas como psicólogos y hablar con la policía cibernética, con el fin de orientarlos correctamente.
Acude a la ciberpolicía
Es fundamental que la ciudadanía sepa que sí puede proceder penalmente en contra de quienes hagan un mal manejo de la imagen de una persona.
En entrevista para GeeksTerra, la dependencia de la Policía Cibernética de la CDMX nos comentó que sí existe la posibilidad de proceder penalmente contra aquellos que abusan de la confianza del otro y usan su imagen en su perjuicio.
Las víctimas «Pueden acudir con nosotros para que podamos conocer la información, a veces el ciudadano no tiene totalmente claro cuáles pueden ser los elementos que en verdad le van a ayudar a un Ministerio Público a dar seguimiento a un caso» señaló la dependencia.
Para mayor información se pueden comunicar con la policía cibernética de la ciudad de México al teléfono 5242 5100 con extensión 5086, también a través del correo electrónico [email protected] o en las oficinas ubicadas en la calle Liverpool 136 en el piso dos colonia Juárez, delegación Cuauhtémoc.
En el caso de que exista intimidación y chantaje, es fundamental guardar las pruebas, ya sean las conversaciones, para poder actuar de forma legal ante las personas involucradas.
A cualquiera le puede pasar, recuerda que practicar sexting no es un delito, pero la difusión de imágenes, fotos o videos, en redes sociales o cualquier otro medio sin tu consentimiento, sí lo es.