La pandemia generó que millones de negocios se mudaran parcial o totalmente al ámbito digital, con tal de sobrevivir al confinamiento de sus clientes miles de empresarios se vieron en la necesidad de adoptar modelos digitales que ofrecen omnicanalidad, y trabajo a distiancia, pero en ese ofrecimiento es de suma importancia la seguridad de la información.
Al hacer transacciones en línea es de vital importancia identificar a los participantes, sólo con una identidad clara es posible evitar fraudes, ya sea contra los clientes o en contra de los comercios.
De acuerdo con datos del Data Breach Investigations Report, publicado por Verizon, el sector empresarial se ve atacado al grado de tener que enfrentar 725 incidentes al día, esos números pueden disminuir si se adoptan las medidas necesarias para atender a las brechas de seguridad que quedan tras la apertura a la omnicanalidad y la digitalización de los negocios.
VU señala la existencia de varios elementos de ciberseguridad que se pueden aplicar a los consumidores y a las empresas que apuestan por una experiencia personalizada de usuario:
- Protocolo de encriptado: Es una herramienta que incorpora aspectos como el establecimiento de claves, autentiucación de entidades participantes, cifrado de los mensajes y métodos de no repudio.
- Autenticación de Múltiples Factores (MFA): esta herramienta usa varias tecnologías para autentificar la identidad de los usuarios que van a acceder a un sistema. Existen tes MFA principales y en uso actualmente que son de conocimiento, que es una contraseña o PIN; de posesión, que es cuando se tiene un dispositivo como una tarjeta; o de inherencia, que es un dato biométrico.
- Detector de anomalías: Permite el reconocimiento de conductas inusuales en los usuarios, como cierto tipo de compras o estancias en sitios que no frecuenta.
- Machine Learning: Herramienta que permite entrenar a una Inteligencia Artificial para que detecte patrones en datos masivos y elaborar predicciones útiles en el campo de la seguridad de la información.
Todas estas herramientas son útiles para las empresas que aceptan el hecho de que la seguridad de los datos de sus clientes se traduce en un activo de valor y confianza, mismo que atrae más ventas, pero las inversiones como la que supone la seguridad de los datos que se puede ofrecer a los clientes deben hacerse sabiamente y no sólo comprando herramientas digitales sin un amplio conocimiento de cómo es que los datos sensibles son resguardados.
A veces no basta con contratar los servicios de un tercero para cumplir con la normativa en cuanto a la protección de datos, es importante entender cómo es que los datos son cuidados por esos terceros, ya que la pérdida de prestigio que surge de un fraude o de una filtración de datos no sólo va contra ellos, sino contra las empresas en las que los usuarios depositaron su confianza.
“Las empresas juegan un doble papel, al ser también consumidores de soluciones de terceros. Así, están obligadas a conocer la forma en que sus proveedores y en general el ecosistemade proveedores, canales y usuarios aseguran los datos sensibles. De esta manera, en este rubro, las inversiones en protección de Identidad y prevención de fraudes son factores de jerarquía, ya que cualquier dato violado es responsabilidad de la empresa e impacta en su reputación, además de que aproximadamente cada brecha le cuesta 400,000 pesos. Por lo tanto, contar con soluciones que resguarden la identidad digital de los usuarios, así como los recursos informáticos de la compañía a través de inteligencia artificial y otras respuestas especialmente adaptadas al negocio, es vital para el bien común del ecosistema”, dijo el Business Development Director de VU en México, Eric Rodríguez.
Para conseguir un entorno seguro es muy importante conocer la manera en que los proveedores de seguridad tratan a los datos al momento de contratar sus servicios, además hay que hacer partícipes a los usuarios de las medidas de seguridad que se van adoptando, ya que eso permite cerrar las brechas y reforzar los eslabones en la cadena de seguridad que se debe formar al rededor de todo ecosistema digital.
Al entender el valor de la información que cada empresa recopila de sus clientes no sólo se mantiene la seguridad en contra de fraudes a las empresas, también se ofrece una mejor experiencia de usuario a los consumidores, mismos que regresarán a los sitios de aquellos negocios con los que han tenido una excelente experiencia, especialmente si es omnicanal y segura.